La humilde palmera de babasú sirve de sustento a las comunidades de mujeres del noreste de Brasil. Del fruto y de su cáscara obtienen harina, carbón, aceite y jabón. El excedente, se vende. Sin embargo, la producción no siempre ha sido un camino de rosas.
Las guerreras del babasú han luchado muy duro para defender su forma de vida. A pesar de la intimidación y las amenazas de los agricultores que han sufrido durante años, estas mujeres negociaron sus propias condiciones y establecieron la «Ley de Libre Acceso al Babasú» en 17 municipios. Esta ley otorga a los recolectores sin tierra el derecho a recoger frutos de los palmerales. Ahora, estas mujeres, un ejemplo a seguir, pueden planificarse a largo plazo, diversificar su negocio y asegurarse un futuro. Ellas luchan por sus familias, por sus bosques y por el Amazonas.
